Pasaron los desfiles del Carnaval y mariquitas, abejorros, libélulas, mariposas... están ya descansado de tanta actividad como tuvieron la tarde del viernes.
Fue una fiesta compartida en la que todos pudimos disfrutar de colorido, ruido y fantasía.
Hasta el tiempo nos acompañó, no llevamos huevos al convento de Santa Clara (creo que lo hacen las novias para pedir que no llueva en el día de su boda) pero casi.
Gracias a los papás y mamás por haber colaborado, tanto en acompañamiento como en la elaboración de los trajes, que ahí se vio vuestro entusiasmo.
Dentro de unos días aparecerán las crónicas, de momento las anunciamos (como García Marquez).
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.