la jornada en el Polideportivo de la Dehesa Boyal resultó estupenda, un tiempo magnífico y realizaron todas las actividades con gran entusiasmo,.
Regresamos agotados pero muy contentos de haber podido disfrutar de un día "de alto riesgo" ( vamos a dejarlo en mínimo) y sin el más leve rasguño.
Ahora serán ellos/as quienes comenten las jugadas. En este momento no dispongo de más fotografías pero llegarán y las iremos mostrando.
Cuando me levanté de la cama enseguida me acordé de que había una excursión, me vestí rápido, me cepillé...
Cuando llegamos los monitores nos explicaron todas las normas, pero la primera actividad fue la orientación y consistía en buscar pistas y dibujarlas en un papel, me gustó mucho, aunque quedamos los últimos, la segunda consistía en escalar una pared vertical gigantesca.
¡Me lo pasé genial!
SERGIO GONZÁLEZ
Nada más llegar al Polideportivo los monitores se presentaron y nos llevaron a una pradera, allí fue donde hicimos el ejercicio de orientaación, dejamos las mochilas bajo un árbol llamado encina y nos pusimos en marcha, ese ejercicio era como una especie de carrera con pistas y mi grupo y yo quedamos penúltimos.
Yo en el rocódromo le dije a la profe que me ayudara porque tenía vértigo y me ponía nerviosa, por supuesto con el arnés, también me deslicé por la cuerda de la tirolina.
IRENE PUYA
Ayer, día 16 de marzo, fuimos a la Dehesa, al principio nos pusieron a cada grupo con un monitor o monitora, a nuestro equipo nos tocó con Ana, que era atleta.
Durante toda la carrera había una emoción que se me salía el corazón, nuestro equipo se llamaba Las Bellotas y quedamos en primer puesto.
SERGIO FERNÁNDEZ
Cuando íbamos terminando de la escalada a algunos le dieron una pelota de fútbol para ir a jugar, después el profe dijo que nos íbamos a la piscina, había una que parecía un río, ¡ te llevaba la corriente! el tobogán tengo que admitir que no me gustó, también fuimos a otras piscinas muy chulis, tenían chorros, el agua calentita...
Para mí fue una experiencia inolvidable. me encantó, espero que se repita.
CELIA
Y por último la piscina, el tobogán molaba, era despacio ¡ más rápido, más rápido ! y .. ¡pas! ¡al agua patos! Inés y yo íbamos juntas y una vez nos llevó la corriente porque en lo último iba más de prisa.
Después nos fuimos a comer a una pradera y María nos dijo que nos iba a hacer una foto bailando.
Yo ese día me levanté temprano y con mucha ilusión porque esta era especial y tenía muchos nervios.
NATALIA
Y colorín colorado, esta historia se ha acabado.
Yo me lo pasé genial y ha sido una verdadera aventura, quiero ir otra vez, aunque después fui a judo y también a Catequesis, llegué a mi casa matao, no podía con mi cuerpo.
CHECHU
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